Sigue filtrándose información sobre el futuro auto presidencial, oficialmente llamado Cadillac One (o más “cariñosamente”, limusina de Obama). Este auto, proporcionado por el Servicio Secreto, aparecerá por primera vez el 20 de enero, cuando deberá transportar a Obama en el desfile presidencial.
Las fotos espías muestran lo que parece un Cadillac DTS muuuy alargado -con parches grises-. A primera vista, el vehículo integra partes de diferentes modelos Cadillac, como las luces delanteras de Xenon del Escalade o ciertos detalles en la vista trasera que recuerdan un STS. En cuanto al calzado, las llantas parecen ser unas Goodyear Regional RHS Sport de 19.5 pulgadas. Los rumores cuentan que el sonido de su motor anuncia un diesel deportivo.
¿Qué hay de cierto en todo esto? Según las declaraciones para CNN de Joanne K. Krell, portavoz de GM, el nuevo vehículo presidencial “no será una extensión directa de un modelo específico de Cadillac”. “El vehículo presidencial es construido bajo requisitos muy especiales y sometido a pruebas extremas, e incorpora muchos importantes aspectos de los automóviles regulares de la firma”, declaró Krell, quien también reiteró el honor de Cadillac de formar parte de esta tradición.
Más allá del diseño de la limusina de Obama, el auto deberá reunir cualidades que integren un alto nivel de protección, tecnología y lujo. Las agencias de noticias ya están hablando de puertas de 8 pulgadas de grosor, capaces de soportar el más fuerte impacto. A estos comentarios se unió el de Ken Lucci, CEO de Ambassador Limousine Inc. y dueño de dos limos en los tiempos del presidente Reagan. Para Lucci, el vehículo presidencial debe ser un “bunker rodante”.
En cuanto a los colores, es mejor no ponernos muy creativos: el Cadillac One será negro (aunque los ecologistas bromeen sobre si debería verde).
Bunker, camión o auto de lujo, la limusina de Obama será el auto americano del presidente americano; tal y como están las cosas, sería un buen augurio que cumpliera con todos los requisitos que se necesitan.
Cuando Barack Obama se posesione oficialmente el próximo 20 de enero, no sólo tomará el cargo máximo, todas las habitaciones y despachos de la Casa Blanca, una buena cantidad de bienes y un jugoso cheque mensual, sino que estrenará una limusina hecha por Cadillac, estrictamente para la presidencia de los Estados Unidos, y que entre otras curiosidades, será un bunker sobre ruedas.