Javier Fueyo

Andy Palmer, CEO de Aston Martin, fue uno de los personajes más solicitados en el pasado Concurso de Elegancia de Pebble Beach y es que suena muy fuerte el rumor de que el fabricante inglés tiene en mente desarrollar un auto totalmente eléctrico.

Se habla de que el auto tomaría como base el Rapide y que muy posiblemente estaría disponible en un par de años más. También suena el rumor de que este vehículo tendría una potencia final de más de 800 caballos de fuerza y una autonomía de aproximadamente 200 millas. Al mismo tiempo, Palmer aseguró que el Rapide eléctrico marcaría el paso para un DBX (crossover) eléctrico, el cual vería la luz a finales de esta década.  

“Si quieres mantener tus motores V12, entonces debes de hacer algo para equilibrar el espectro”, dijo Palmer en defensa de la estrategia de la compañía. Autos sin emisiones sirven para balancear lo contaminantes que pueden ser los V8 y los V12, en especial en mercados como el de China.

Aunque no se tiene un precio específico, sí se supone que debería estar entre 200 y 250 mil dólares el Rapide eléctrico.

El auto llevaría baterías desarrolladas por proveedores ya establecidos, tales como LG o Samsung. La producción sería de algunos cientos anuales y ninguno de los componentes se compartiría con Mercedes, quienes poseen el 5% de Aston Martin.