Un modelo en el que el preparador alemán se ha arriesgado a preparar.
Quizás el Tesla Model S P85D sea lo suficientemente perfecto en prácticamente todo como para no necesitar modificaciones de ningún tipo, pero nuestros amigos de Brabus no piensan de esta manera. Así pues, proponen cambios en la aerodinámica y también en el diseño tanto exterior como interior. De momento, el sistema eléctrico queda intacto, con sus brutales cifras: 772 caballos de fuerza y 996 lb/pie de torque.
Para empezar, Brabus permite a los conductores del P85D cambiar ligeramente la estética para diferenciarse del resto. Apuestan por unos rines de 21 pulgadas y fibra de carbono, para los spoiler tanto delantero como trasero (éste último sobre la tapa del maletero), para el difusor o para las entradas de aire. En todo caso, algunos elementos tienen función aerodinámica, y no simplemente estética.
Donde más cambia el aspecto de este Model S es en el interior, donde encontramos ahora una tapicería específica de cuero y alcántara, inserciones de madera y fibra de carbono (a juego con el exterior), alfombrillas Brabus, listones de los umbrales de las puertas de acero inoxidable y con inscripción Brabus retroiluminada (en blanco y azul), e incluso una consola central rediseñada que ahora ofrece más espacios para guardar objetos, incluído un portabebidas refrigerado y calefactado.
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Poco a poco nos vamos acostumbrando a que China plagie modelos que triunfan en Europa y Estados Unidos, aunque lo que hoy les traemos no es una copia.
Una camioneta ultra capaz en condiciones difíciles del terreno.
