Jose Carlos De Mier - @GPSmediaexperts

Pobremente gestionada. En esta ocasión esta columna debería llamarse mi día de infamia. No sé muy bien qué empresa gestionó la presencia del nuevo campeonato FIA en Miami, la Fórmula E, bueno, no lo sé oficialmente porque no conseguí que este periodista fuera acreditado para la carrera. Después de casi 30 años siguiendo certámenes y carreras en medio mundo, en esta ocasión ni un servidor ni nuestros medios representados fueron bienvenidos. Pero ese es nuestro problema, y como no hay mal que por bien no venga, asistimos como cualquier otro espectador, además de periodistas somos apasionados del motor, pero no podemos resistir reportar lo que vimos.

Nos consta que el promotor Alejandro Agag y toda la organización del certamen están haciendo un gran esfuerzo por sacar adelante el campeonato. Arropado por la FIA. Pudimos ver el esfuerzo tecnológico que se está haciendo en las comunicaciones con los autos, el cronometraje, la retransmisión televisiva, el consumo de energía, el control de la igualdad en la carrera, el desarrollo de los autos, la imagen, los VIP… pero al menos en esta ocasión faltó cuidar al público. Está bien vender el programa oficial de la prueba en 10 dólares pero no estaría de más repartir algo de información sobre la tecnología de los autos, los pilotos que corren, de donde vienen… hay mucho talento encerrado en esos muros, en esos autos eléctricos de aceleración electrizante (nunca mejor dicho) poca autonomía y velocidad punta, pero estética futurista y cuidada.

Señores de la Formula e, Miami, la experiencia urbana merece más que un solo puente para cruzar la pista. Fue tedioso, peligroso y en ningún caso representa el futuro de la competición, por mucho que el banner que le coloquen encima tenga 15 metros. La megafonía tiene que mejorar, sabemos que es difícil pero en un campeonato que empieza la gente tiene que ser “educada” sobre lo que está viendo. Respecto a las pantallas, gran idea, sobre todo teniendo en cuenta que el 30/40% de la gente no veía más allá de lo que le permitía acercarse al muro de hormigón, pero se necesita más calidad. La señal que sale del paddock es de primera calidad, el promotor local tiene que hacer que así se vea en las pantallas, que podamos leer el nombre de los pilotos, que podamos ver los grafismos espectaculares que prepara el equipo de tecnología del promotor con claridad y aprender más sobre lo que estos autos son capaces. Otro tema son las uniones en el asfalto que probablemente cuando uno circula en los autos de calle, parecieran superficies perfectas, pero al ver a un monoplaza de suspensión rígida y a muy alta velocidad, nos deja en claro que no es apropiado para llevar a cabo una carrera de este tipo. Hay que buscar una solución pronto… o varias.

Más allá de que sean prácticamente mudos, algo que para mi generación va a ser difícil de superar, hay un público para ellos. Por ejemplo mi hija mayor (11: generación post cambio climático) estaba feliz. Muy crítica con las carreras “tradicionales” por el consumo de energía y el ruido, disfrutó en la fórmula de autos eléctricos como la que más.

Clasificación final Miami ePrix

01 Nicolas Prost, e.dams-Renault
02 Scott Speed, Andretti, +0.433 s
03 Daniel Abt, Audi Sport ABT, +5.518 s
04 Jerome d’Ambrosio, Dragon Racing, +5.941 s
05 Nelson Piquet, China Racing, +6.426 s
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10 Salvador Durán (México), Amlin Aguri, +24.587 s