El amor de 50 cents (nombre artístico de Curtis Jackson) con los autos ha estado plagada de pasión, problemas y accidentes; en un inicio más “accidentes” que pasión. Hay que recordar que la juventud de Jackson se desarrollo entre pandillas y traficantes de drogas, de hecho él era uno de ellos.

 

El primer auto de Jackson fue un adquirido en el año de 1994, a la edad de 19 años y con las ganancias del negocio de traficante, se trató de un Toyota Land Crusier; en ella instaló un sistema de audio tan potente que logró estrellar el medallón del auto, la razón por la que tuvo que venderlo fue que un traficante de otro territorio tenía una Land de aspecto semejante a la de 50 Cents, y continuamente lo confundían buscando problemas.

 

Su siguiente auto fue un Mercedes Benz blanco modelo 400 SEL con ventanas a prueba de balas para evitar “confusiones” y un motor V 12 de 6,0 Litros; pero resultaba muy notorio y constantemente alguien (regularmente la gente con la que se relacionaba en su trabajo) quería robarle el Mercedes, más de una vez tuvo que literalmente escapar por callejones con este auto.

 

Posteriormente, la vida lo saca del tráfico de drogas y lo mete de lleno en el mundo de la música; como no ganaba mucho dinero, compra un Dodge Caravan 1992 en el cual se sentía atrapado, sin aire acondicionado dicho Dodge es recordado con tristeza por el cantante.

 

Pero su apuesta por la música pronto vio resultados; en 2003 saca su primer disco y llegan las ventas millonarias; ocho millones de copias y un Rolls Royce Phantom personalizado fueron el resultado inicial de esta aventura por el mundo legal.

 

Desde entonces Jackson ha comprado y personalizado una decena de autos, tras cada disco exitoso se compra un superdeportivo para celebrarlo; de los más destacables de su colección podemos mencionar:

Dos Suburban Chevrolet antibalas que cuentan con trenes de aterrizaje a prueba de bombas

Un Lamborghini Murcielago de $300.000.00 que fue pintado gris oscuro, al igual que su Land Cruiser de los viejos tiempos.

Un descapotable de Ferrari y una motocicleta Yamaha YZF-R1, además de un Bentley Mulsanne con asientos de cuero beige

 

Y por si fuera poco, el rapero ha desarrollado un lujo caro (uno más) que es el de diseñar y construir sus propias creaciones, prototipos que están guardados eh su garaje para salir un domingo que no tenga mucho qué hacer; así es la vida de estos millonarios excéntricos.

 

En la actualidad, 50 Cents ha declarado que el cambio en su vida hace que ya no le tema más a los traficantes de drogas de las calles de Nueva York, y dice que a lo que ahora realmente le teme es al recaudador de impuestos, eso sí que le preocupa realmente.