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Los subcompactos que –todavía- se venden en USA

Cuando se disparó el precio de los combustibles la década pasada, ...

Chevrolet Sonic, desde $16,720. El Sonic sigue a la venta por una sola razón: es el único subcompacto que aún se fabrica en Estados Unidos, aunque sus días están contados. En el resto del mundo, Chevrolet lo ha sustituido por vehículos de desarrollo y/o fabricación chinos.

Chevrolet Spark, desde $13,400. Los autos urbanos, apenas por arriba de los Kei Car, son buscados por su tamaño práctico, su economía de combustible y su precio accesible, pero en un mercado que prefiere las carrocerías y los motores grandes, el Spark fabricado en Corea es testimonial.

Fiat 500, desde 16,495. El Cinquecento fue cesado desde el año pasado y ya dejó de fabricarse en México, pero aún aparece en la página de Fiat, de modo que aún podrían encontrar una unidad. No parece haber planes de traer la nueva generación solo eléctrica.

Hyundai Accent, desde $15,395: El Accent tiene la ventaja de fabricarse en México junto con el Kia Rio, por lo que debería tener un lugar asegurado, pese a la llegada de la Venue. En otros mercados hay una carrocería hatchback, que no se oferta en USA.

Kia Rio Hatchback, desde $16,790. Uno de los pocos hatchbacks subcompactos que quedan. También se fabrica en México, en el estado fronterizo de Monterrey, de modo que, aunque contenido, tiene el segmento casi para él.

Cuando se disparó el precio de los combustibles la década pasada, muchas marcas optaron por ofertar autos subcompactos en USA. Mientras que en Estados Unidos eran un segmento testimonial, en el resto del mundo son una opción válida, sin embargo, a medida que el combustible bajó y el mercado se decantó por Crossovers, su número se redujo paulatinamente: incluso recién se confirmó la salida del Toyota Yaris y el Honda Fit. Veamos cuáles son los subcompactos que aún se venden en USA.
Curador: José Virgilio Ordaz

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El Nissan Z a través de sus generaciones

El Nissan Z Proto fue la presentación más importante de los ...

Cuando Yukata Katayama, director de Datsun America, decidió impulsar el desarrollo de un deportivo biplaza, quizá no tenía idea que estaba gestando una de las primeras leyendas automotrices del archipiélago nipón. El Nissan 240Z, Datsun 240Z o Fairlady Z llegó en 1969 con un motor L6 2.4 l de 151 hp.

Regulaciones ambientales obligaron a usar un motor más grande en 1974, que en Estados Unidos ofrecía 140 hp y en el resto del mundo 165 equinos. Se introdujeron algunas mejoras y una carrocería 2+2, mientras que al cambiar el desplazamiento a 2.6 litros, el nombre cambió a 260Z.

Regulaciones aún más estrictas en 1975 obligaron a incrementar una vez más el cubicaje, a 2.8 litros, con 170 hp e inyección de combustible. Entre las actualizaciones, destacó el cambio a fascias absorbentes con una base corrugada, por normas de seguridad.

Una nueva generación llegó en 1978, con un diseño más angular. El auto recibió toques más hedonistas y una suspensión más cómoda para volverse un Grand Tourer, por lo que se agregó una “X” al nombre: 280ZX. Se conservó el 2.8 l, pero al medir ahora la potencia bajo la norma SAE, la cifra neta cayó a 135 hp-145 hp. En 1981 se introdujo una variante turboalimentada de 180 caballos.

El 300ZX Z31 (1983) vivió la transición de Datsun a Nissan. El motor ahora era u V6 3.0 l, que producía 160 hp sin asistencia y 200 caballos con turbocompresor. En Japón hubo un motor 2.0T y en otros mercados la variante Turbo llegó a producir 240 hp.

El Nissan Z Proto fue la presentación más importante de los últimos días, pese a no ser un modelo definitivo; sin embargo, es el pretexto perfecto para repasar la evolución de las generaciones de uno de los deportivos japoneses más icónicos.
Curador: José Virgilio Ordaz

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Nissan Z Proto: te mostramos sus claves de diseño

El Nissan Z Proto nos adelanta al heredero del 370Z, con ...

Este elemento se tomó directamente del Datsun Z original, que requería la elevación para su motor de seis cilindros en línea. El diseño del Z Proto fue firmado por Yoshihiko Matsuo.

En su mercado natal, algunos Fairlady Z tuvieron una protección acrílica en los faros. Esta también se vio en algunas unidades restauradas y vendidas por el fabricante a finales de los 90.

La parrilla cuadrada fue de los elementos más polémicos, al prescindir del diseño corporativo. Sin embargo, aunque con distintas dimensiones, esta parrilla ha estado presente en varios autos Z.

El Nissan Z Proto nos adelanta al heredero del 370Z, con sus genes bien cimentados en la tradición, principalmente, en el diseño del 240Z y el 300ZX. Veamos cuáles son sus principales elementos.
Curador: José Virgilio Ordaz