Se dice que mantendrá un propulsor V10, que ahora estará supercargado y cuya potencia se acercará a la barrera de los 600 caballos, conservando también el característico sistema de tracción total.
Entre los materiales de construcción de su estructura y carrocería estarán la fibra de carbono y el plástico reforzado por fibra de carbono, que contribuyen, como bien ya se sabe, a una resistencia destacable sin necesidad de que aumente en exceso el peso.
Sólo se harían 20 ejemplares y cada uno de ellos estaría disponible a un precio de 2 millones de euros.
Lamborghini apuesta por renovar el segmento de los superautos con una pieza dedicada de ingeniería y diseño que deja al más ajeno al mundo de los coches sorprendido en todos los sentidos.