Porsche alcanzó el pasado mes de enero una participación del 50,76% de los derechos de voto de Volkswagen, que lo convertía en el principal accionista del consorcio de Wolfsburg. La intención de la firma de Stuttgart era elevar esta participación al 75%.
El acuerdo anunciado hoy supone el nacimiento de un grupo automovilístico con diez marcas independientes (Volkswagen, Porsche, Audi, Seat, Skoda, Bentley, Lamborghini, Bugatti, Volkswagen Vehículos Comerciales y Scania) que se refuerza como primer fabricante de vehículos de Europa.
Los consejos de administración de las dos empresas tienen previsto negociar los términos de la integración de ambas compañías en las próximas cuatro semanas, con la participación activa de representantes del Estado de Baja Sajonia, titular del 20,01% de los derechos de voto de Volkswagen.
Tal y como avanzaron a finales de la semana pasada varios medios de comunicación alemanes, Volkswagen y Porsche han detenido su proceso de fusión. Un portavoz de VW confirmó la noticia, alegando que las negociaciones con Porsche habían sido “poco constructivas” y que no ha habido la atmósfera adecuada para proseguir con el diálogo.
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