Hace dos años, el Cybertruck de Tesla fue recibido con gran entusiasmo, impulsado por la promesa de Elon Musk de revolucionar el mercado de las camionetas eléctricas. Con más de un millón de reservas y un diseño futurista, la expectativa era altísima. Musk se jactó de que la demanda era “descontrolada” en 2023, pero la realidad ha sido muy diferente. A pesar de las grandes expectativas, las ventas no han alcanzado los objetivos y el Cybertruck ha sido una gran decepción comercial. Según Cox Automotive, Tesla vendió menos de 39,000 unidades en 2024, muy por debajo de la meta de 250,000 unidades anuales.
Uno de los principales factores del fracaso del Cybertruck ha sido el aumento de precio. Mientras que inicialmente se prometía un precio de entrada de 39,900 dólares, el modelo base ahora cuesta 60,990 dólares. Las versiones más caras, como el Cyberbeast, tienen precios que superan los 100,000 dólares. Estos aumentos no fueron bien recibidos por los consumidores, que también se enfrentaron a problemas de calidad tras el lanzamiento, con al menos 10 retiradas del mercado desde 2024. Los problemas de fabricación han afectado la reputación de la camioneta y han contribuido a su bajo desempeño en ventas.
El diseño futurista del Cybertruck también ha sido un obstáculo. Mientras que muchos pensaban que su estilo angular y único atraería a los compradores de camionetas, este enfoque ha demostrado no ser el adecuado para el mercado tradicional de camionetas, que busca vehículos más prácticos y robustos para el trabajo. El Cybertruck se percibe más como un producto de lujo o un símbolo de estatus para compradores urbanos, en lugar de una herramienta de trabajo, como apuntó el CEO de Ford, Jim Farley. Esto ha hecho que muchos consumidores se decanten por opciones más convencionales, como la Ford F-150.
El comportamiento de Elon Musk también ha jugado un papel en la caída de popularidad del Cybertruck. A medida que Musk se ha involucrado más en la política y ha adoptado posturas polarizadoras, muchos clientes se han sentido incómodos con la asociación del modelo a la figura de Musk. Esto ha afectado a la imagen de Tesla, lo que según un estudio reciente de la Universidad de Yale, podría haberle costado a la marca más de un millón de ventas de vehículos en los últimos años.

Tesla no es la única que enfrenta problemas con las camionetas eléctricas. A pesar del hype inicial, las camionetas eléctricas no han logrado ganar terreno frente a sus versiones de gasolina, principalmente por su alto precio y la preocupación sobre su fiabilidad. Modelos como el Ford F-150 Lightning y la Chevrolet Silverado EV también han tenido dificultades para captar la atención de los consumidores. Mientras tanto, algunos fabricantes, como Ford y la startup Slate Auto, están trabajando para reducir los costos de producción y ofrecer camionetas eléctricas más asequibles, lo que podría ser la clave para revolucionar este segmento en el futuro.