La marca más vendida del planeta no podría faltar en esta lista. Toyota lleva décadas fabricando motores que resisten el paso del tiempo y el maltrato. El V6 2GR de 3.5 litros ha impulsado a modelos como el Camry, Highlander o Tacoma, siendo uno de los más fiables jamás construidos. Mención especial merecen los míticos 1JZ y 2JZ, que se ganaron fama en deportivos y sedanes, así como la familia UZ, presente en todoterrenos y pick-ups como la Land Cruiser o la Tundra. En Toyota, la fiabilidad es una seña de identidad.
Pocos fabricantes han construido tanta reputación en base a sus motores como Honda. Sus bloques de las series K, J35 y H22A han demostrado ser auténticas máquinas de fiabilidad, con numerosos casos de vehículos superando los 300.000 kilómetros sin complicaciones. Modelos como el Civic, Accord o CR-V se han convertido en referentes mundiales, en parte gracias a la robustez de sus motores. Para los entusiastas, Honda representa rendimiento accesible y resistencia mecánica.
La división premium de Toyota se ha convertido en sinónimo de durabilidad. Según los estudios de J.D. Power, Lexus lidera el mercado en fiabilidad año tras año. Motores como el 2JZ, el 1UR-FE y las variantes 2GR son auténticos referentes, capaces de recorrer cientos de miles de kilómetros sin problemas graves. Además, el coste de mantenimiento es sorprendentemente bajo para un fabricante de lujo, lo que convierte a Lexus en una apuesta segura.
Dentro del gigante General Motors, Chevrolet destaca por la resistencia de sus motores, especialmente los V8. La familia LS, con más de 25 años de evolución, se ha ganado fama de indestructible y fácil de mantener. El LT1 de 5.7 litros, que en los 90 impulsaba a los Corvette y Camaro, se convirtió en leyenda. Hoy en día, la nueva generación de propulsores está consolidando a Chevy en los rankings de fiabilidad de J.D. Power, situándola como un referente en motores de alto rendimiento y larga vida útil.
La marca del óvalo azul tiene una historia inseparable de los motores. Desde que Henry Ford inventó su primer propulsor, la compañía ha sido referente en durabilidad. Los legendarios V8 5.0 Coyote y V6 3.5 EcoBoost son ejemplos de fiabilidad y potencia que han superado el millón de kilómetros en muchos casos. Ford sigue innovando con bloques híbridos y eléctricos, pero mantiene su esencia en los motores de combustión más sólidos del mercado.
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