Javier Fueyo

Hay un viejo dicho comunista que reza: "Los hijos de Rusia están hecho de acero", una sentencia que no debe tomarse a la ligera. En fechas recientes, el futbolista ruso Andrey Yeshchenko, quien jugó en la escuadra rusa durante la Copa FIFA 2014 y quien actualmente se desempeña como defensor del equipo Kuban Krasnodar, fue captado por cámaras de tránsito mientras conducía su Nissan GT-R a una velocidad aproximada de 170 km/h. Tras perder el control del vehículo, el ruso se estrelló contra un poste de luz, aunque por fortuna salió ileso del incidente. Por fortuna, pues ahora podrá enfrentar la pena que merece por conducir de manera tan imprudente.

De acuerdo con declaraciones de testigos  oculares, el jugador del Kuban Krasdonar conducía bajo los efectos del alcohol, una versión que ya ha sido desmentida en repetidas ocasiones por Yeshchenko. En las imágenes que les presentamos a continuación, podemos apreciar cómo el Nissan GT-R del ruso es avistado por las cámaras avanzando a una velocidad que representa un peligro, tanto para el conductor como para los vehículos que lo rodean. De repente, Yeshchenko enfila hacia un poste de luz y se impacta al no poder corregir su trayectoria.

No obstante, tras escasos segundos, el futbolista emerge de las entrañas retorcidas de su vehículo y se aleja desorientado, pero sin un rasguño. Podemos pensar que Yeshchenko tiene una suerte digna de envidia y una segunda oportunidad para resarcir sus errores, pero no podemos evitar pensar que la historia sería muy distinta si es que la alocada carrera del ruso hubiera sido detenida por una persona. Hombre o mujer, niño o niña. Tan sólo diremos que Yeshchenko es un tipo con cierto tipo de suerte y esperamos que sus faltas sean saldadas.