Tesla ha logrado lo impensable: un SUV familiar de casi dos toneladas que acelera de 0 a 100 km/h en apenas 3,3 segundos, superando incluso al mítico Porsche 911 GT3. Con sus 460 CV y una velocidad punta de 250 km/h, este modelo no solo rivaliza con berlinas como el BMW M5 o el Audi RS6, sino que abre un nuevo capítulo en la historia de los coches eléctricos de alto rendimiento.
El Model Y Performance estrena suspensión con amortiguadores adaptativos, nuevos resortes, barras estabilizadoras y un set de llantas de 21 pulgadas con frenos de pinza roja. No se trata solo de potencia bruta: Tesla ha puesto a punto este SUV en el legendario Nürburgring, cuna de pruebas de los deportivos más extremos. Aquí, como en la Fórmula 1, cada detalle técnico ha sido ajustado para ofrecer precisión y resistencia.
La batería adopta nuevas celdas de alta densidad, capaces de mantener una autonomía estimada de 580 kilómetros pese al aumento de prestaciones. El habitáculo también da un salto en calidad: asientos deportivos Performance, acabados en fibra de carbono, pedales de aluminio y una nueva pantalla táctil de 16 pulgadas en alta resolución que convierte la cabina en un auténtico centro de mando futurista.
Con un precio de salida de 61.990 libras en Reino Unido, el Tesla Model Y Performance no solo desafía a los superdeportivos de gasolina, sino que marca un antes y un después en el mercado de los SUV eléctricos premium. Es práctico, rápido y tecnológicamente avanzado, un cóctel que muestra cómo el futuro del automóvil ya no está en manos de los motores de combustión, sino en la innovación eléctrica que Tesla lleva por bandera.
En atributos de conducción, como la estabilidad, el balanceo corporal, la dirección y la ...
