Javier Fueyo

El Chevrolet Volt es, de acuerdo con la Sociedad de Ingenieros Automotores (SAE en inglés), un híbrido conectable a la corriente eléctrica, ya que cuenta con dos motores, uno de gasolina y otro eléctrico, aunque sólo este último es el encargado de mover al carro, mientras que el de combustión interna está destinado a ser una especie de planta de recarga portátil para extender el rango de manejo eléctrico. Completa a este eléctrico un paquete de baterías de litio-ion de 200 kg con una capacidad de 16 kWh, aunque sólo emplearán la mitad para garantizar la vida útil hasta por 10 años y jugar con la fluctuación de carga y descarga.

Su autonomía con la carga completa de baterías es de 40 millas o 64 km. Con ello GM estima que satisface las necesidades de movilidad diaria de más del 75% de los conductores norteamericanos, pero puede llegar a más de 280 millas o 450 km con el rango extendido y un tanque lleno, del que todavía no quisieron revelar su capacidad. Así, quien tenga un Volt podría ir venir del trabajo de manera eléctrica y cargar el auto durante la noche. Si recorre más de lo esperado, el motor de gasolina entra al quite y extiende el rango hasta que de nueva cuenta en la noche lleguemos a casa a conectarlo.

De hecho, para recargar las pilas se utilizaría principalmente conectarlo a una toma de corriente de 110 ó 240 V, y llenarlas en 6 ó 3 horas. El rango extendido es sólo eso, un aumento de autonomía. La gente de GM no quiere separarse de ese concepto, puesto que sería completamente ilógico utilizar un combustible seis veces más caro para generar algo que obtendríamos por seis veces menos costo. El motor de gasolina (que por cierto acepta la mezcla E85 con etanol), es un cuatro cilindros de 1.4 litros de más de 100 HP, que es capaz de generar casi 400 V. Este motor se enciende automáticamente y puede girar entre las 1,000 y 4,500 rpm, de acuerdo a los requerimientos del sistema y lo hace automáticamente. Se suman frenos regenerativos y el aprovechamiento de la inercia del motor eléctrico en pendientes o en el modo L, que genera más retención y permite mandar más energía al paquete de baterías.

Curiosamente veremos en los instrumentos que ya no tenemos autonomía eléctrica, pero seguiremos rodando en este modo y es que el motor de gasolina se enciende cuando las baterías caen al 30% de su carga, comienza la recarga y digamos que el Volt rueda en una especia de modo “búfer”, como cuando en Internet cargamos una estación de radio o película y se cargan varios segundos antes de que veamos o escuchemos para evitar que llegue un momento en que se congele el video o perdamos el audio. Así, tal cual, funciona el Volt.

Más información del Chevrolet Volt 2011

Así funciona el Chevrolet Volt 2011

Cronología de los autos eléctricos de GM

Prueba de carros: Primer contacto con el Chevrolet Volt 2011