Cómo gusta BMW de revestir a sus modelos de un áurea de trascendencia y novedad. Al X6 lo bautizaron como fundador de un nuevo segmento del mercado el de los SAV, Sport Activity Vehicle, y ahora presentan al X1 como primer compacto dentro de este inventado mercado.
Aceptemos o no las palabras de BMW, lo cierto es que el X1 será, si no la más importante, una de las más esperadas novedades del Auto Show de París. La versión que veremos en la capital francesa no será la definitiva; es simplemente un prototipo dirigido a entusiasmar en una exhibición automovilística de este calibre. Pero servirá para darnos pistas muy fidedignas de lo que será el futuro X1.
Con 175 pulgadas de longitud (4 menos que el X3), el X1 está desarrollado sobre la actual plataforma del Serie 3. De esta forma, en su oferta mecánica figurarán varios motores de gasolina de cuatro y seis cilindros turboalimentados de inyección directa a los que habría que añadir los correspondientes Diesel. Incluso, no se descarta una versión híbrida con motor de gasolina y motor de combustión interna (ya sea de gasolina o Diesel), ahora que está tan de moda los llamados vehículos verdes.
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Probamos por vez primera, la BMW X1. La nueva SUV compacta de la marca alemana ha recibido todo el apoyo de BMW, con el objetivo de convertirla en un superventas. Las buenas sensaciones que nos dejó la X1 en la breve toma de contacto que realizamos nos hacen apostar por ella. Eso sí, a nuestro mercado no llegará hasta 2011.
Mientras todos esperamos que la BMW X1 se presente oficialmente en el Auto Show de Frankfurt, las expectativas crecen a medida que aparecen nuevas fotos espías y se escuchan nuevos rumores. En este caso, fue la propia BMW la que sacó a la luz las fotos de la X1 con camuflaje.
Pocos días después de la presentación del BMW X1 Concept en el Salón de París, cazamos a una unidad de producción haciendo pruebas en pista y lucía muy similar al prototipo develado. Ahora hemos capturado spy shots de otra unidad, esta vez jugando con sus capacidades fuera del asfalto.
BMW ha anunciado sus planes corporativos para los próximos meses y, la verdad, no son nada edificantes. Además de despedir a 26,000 personas entre febero y marzo, cerrará dos plantas, recortará horas de fabricación y producirá 38,000 unidades menos de varios de sus modelos. Por si fuera poco, también baraja pedir ayuda al Gobierno alemán, una maniobra parecida a la realizada por el Big Three.