Volkswagen utiliza la denominación ID. para sus vehículos eléctricos, un símbolo de su transición hacia la movilidad limpia tras el escándalo Dieselgate que le costó miles de millones en multas. Desde 2019, con el lanzamiento del ID.3, la marca ha consolidado su familia de eléctricos con distintas configuraciones de batería, potencias y autonomías, incluyendo el ID.4, ID.5, ID.7 y la furgoneta eléctrica ID.Buzz. Este cambio refleja el compromiso de Volkswagen con un futuro sostenible y tecnológico, integrando la experiencia de conducción propia de la marca con innovación eléctrica.
Actualmente, los estadounidenses pueden adquirir el ID.Buzz y el ID.4. El ID.Buzz revive el icónico Microbus con diseño moderno, dos versiones de tracción (RWD y AWD) y hasta 375 km de autonomía, destacando por su versatilidad y 4,5 m³ de espacio de carga con los asientos abatidos. El precio parte de los 59.995 $ para el Pro S y llega a 69.995 $ para la primera edición con tracción total.
El ID.4 es un SUV eléctrico compacto de dos filas, disponible con tracción trasera o total, batería de hasta 82 kWh y autonomía de entre 422 y 470 km, según la versión. Con un espacio de carga de 8,2 m³ detrás del asiento trasero, ofrece practicidad combinada con eficiencia eléctrica. Los precios oscilan entre 45.095 $ para el Pro RWD básico y 57.295 $ para el Pro S Plus AWD, situándolo como competidor fuerte en el segmento de SUV eléctricos.
La gama ID. representa un punto de inflexión para Volkswagen, uniendo diseño, tecnología y respeto al medio ambiente. Desde el compacto ID.3 hasta la espaciosa furgoneta ID.Buzz, la marca ofrece soluciones para distintos perfiles de comprador, consolidando su posición en el mercado global de vehículos eléctricos. Esta familia no solo busca eficiencia, sino también mantener la experiencia de conducción característica de Volkswagen, algo muy apreciado incluso por los aficionados a la Fórmula 1 y la conducción deportiva.
Excelente trabajo hace el Grand Highlander absorbiendo las imperfecciones de la carretera.
